Largois
He querido separarme de mi voz, lengua y cualquier elemento que me haga sonar. No soporto que algo que salga de mis adentros se los lleve el viento, las personas, el tiempo... no más. No es por egocéntrico, ni mucho menos; es por dolor. Me duele cada vez que usan, olvidan, recuerdan, lamentan, perdonan, o cualquier cantidad de acciones que hagan manejar mis aires hechas palabras, cambiando mi forma de ver y pensar lo que nos rodea o llevamos por dentro. No soporto los puntos de vista. Ahora miro el horizonte sin voces que me carcomen, pues ellas también entendieron lo que pasaba, y decidieron callarse. No tengo conciencia. Creo que tengo mi propio criterio para juzgarme... increible. He llegado al punto que, hasta conmigo mismo, estoy en acuerdo con mis actitudes, actuaciones, pensamientos... he llegado al punto de los puntos suspensivos. Definitivamente, el hecho de hablarme en otra lengua cambia hasta lo más grande del mundo externo. Largois es como la fotosíntesis, cambio por dentro, cambio por fuera. No necesité de psicólogo o algún cirujano para ayudarme a cambiar. Ni terapias, ni sesiones, ni dinero, tuvieron que ser realizadas o gastadas por mi. Solo necesité "anestesia" y tiempo, que eso sí lo tuve que poner allí, a mi lado. No fue fácil, pero alguien tenia que dejarlos. Eso si, no me puedo dar el lujo de decir, que fuí el primer ser humano que ha logrado encontrar a Largois para calmar su vida. Tengo que darle más crédito a las tarjetas. Cada vez que una persona trata de buscarse en lugares, nunca se encuentra. Largois lo encuentra a uno. Steven Tyler lo encontró y pudo escribir algo de el/ella/eso en Amazing. Fácil decirlo, difícil hacerlo. La idea, por parte de las personas, no es encontrar, es creer.
Yo les contaría, pero la verdad, he preferido guardar silencio.
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